No cabe duda que cada
día más se necesitan verdaderos líderes que se comprometan en tu vida y no que
solo se involucren utilizándote para sus fines. La diferencia entre
comprometerse e involucrarse es tan clara como que para desayunar unos
huevos con jamón se necesitó que el cochino se comprometiera, dando su vida y
solo se necesitó que la gallina se involucrara poniendo los huevos.
¿Por qué hay una gran cantidad de madres solteras el día
de hoy? Por la gran cantidad de padres que solo se involucran y no se
comprometen. ¿Por qué hay tantos ancianos viviendo solos el día de hoy? Por
tantos hijos que solo se involucran en las vidas de sus papás pero no se
comprometen, incluso los hacen meterse en problemas y después los dejan solos.
Líderes sociales que mueven masas, que mueven mucha gente
argumentando problemas. Y sin embargo, defraudan a su gente puesto que después
de mucho movimiento, se arreglan con los afectados y despiden a la gente
diciéndoles que resulta que no se puede. No cabe duda que en muchos de estos casos “Cuando los perros ladran, solo el de
adelante sabe porque lo hace”.
El detalle es que muchos de estos líderes no se han dado
cuenta que los tiempos han cambiado y que la gente no es tan fácil engañar ya
como antes. Incluso puede que el seguidor ahora sea el que te esté engañando.
También se ignora que los verdaderos liderazgos han pasado a la historia no por
involucrarse, sino comprometerse.
Hay una gran
diferencia entre involucrarse y comprometerse. En muchas parejas esto se ve,
hay uno que lucha, que quiere que todo esté mejor, que se entrega y hay otro
que ni siquiera nota lo que su pareja hace.
Si quieres ser un
líder exitoso y que tu liderazgo dure por los siglos, tendrás que ser un líder
comprometido.
Aprende de Jesucristo
quien no solo hablaba sino se comprometía con la gente puesto que decía que no
había venido a ser servido sino a servir. En una ocasión la gente que lo seguía
no tenía para comer y entonces ordenó que se les diera de comer. Él decía que
“No hay mayor amor por los amigos que dar la vida por ellos” Y mira lo que
hizo.
También puedes aprender de la Madre Teresa de Calcuta, quien en vez de quejarse,
se comprometió por las personas enfermas en un país de minoría católica.
Martin Luther
King quien se comprometió por la lucha de las causas de su raza, aunque con el
riesgo de ser asesinado y eso fue lo que sucedió.
Uno de los
pasajes bíblicos que me recuerdan mucho al Líder Comprometido es la del Buen
Pastor que “Da la vida por sus ovejas”. Y Jesucristo dice que cuando pierde una
deja las 99 y va en busca de la oveja perdida. Y al encontrarla se alegra y
cura sus heridas.
En cambio
¿Cuántos líderes en verdad les importa lo que realmente está pasando en la vida
de sus seguidores que se han alejado?
Y tú ¿Solo te
involucras o te estás comprometiendo?
Como ser Líder
Comprometido
1.- Muestra en realidad interés en sus
problemas. No intentes
abarcar más allá de las personas que puedes atender. Recuerda que al ayudar a
una persona ella influirá en otra y ya no será 1 si no 2. Después de 2 serán 4,
después de 4 serán 8 y así sucesivamente se irán multiplicando, creando el
efecto multiplicador mínimo al cuadrado.
2.- Ponte en el lugar
de los demás. Trata a la gente como te gustaría ser tratado y
cúmpleles cómo te gustaría que te cumplieran.
3.- Ten cuidado con
tus palabras. Es mejor ser conocido por tus acciones que por tus
promesas. Tus acciones serán la mayor de tus propagandas.
Eso me recuerda las
palabras de Jesucristo: “…los ciegos ven, los cojos andan, los leprosos quedan
limpios y los sordos oyen…”
4.- Llega a la causa
real del problema de tu seguidor. Muchas veces las personas piden una solución que en
realidad no es realmente lo que necesitan para salir de sus problemas de manera
integral.
5.- Forma líderes que
a su vez hagan lo mismo que tú haces. Así, influenciaras a la vez en más personas.
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